importancia del concepto de salario emocional laboral

El salario emocional: qué es y cómo mejorarlo

 

Para que dentro de una empresa o compañía se logre un ambiente productivo y sanamente competitivo entre quienes componen la planta laboral en cuestión, es fundamental que no se descuide el aspecto emocional y el buen clima de trabajo. En la actualidad, una manera de motivar el buen desempeño de los empleados es aplicando lo que se conoce como salario emocional, término utilizado para hacer referencia a todos los incentivos no económicos o monetarios que sirven para reconocer logros y éxitos de los trabajadores.
¿Cómo podemos lograr que nuestros empleados se comprometan mucho más con sus tareas y generen un mejor clima laboral a través del salario emocional? En el artículo de hoy te contamos un poco más acerca de este fenómeno tan eficiente y positivo .

¿Qué es el salario emocional?

Para que una compañía funcione correctamente y obtenga los beneficios deseados, tener una planta laboral saludable y en buenas condiciones es prácticamente imprescindible. Existen diferentes maneras de motivar a los empleados, y el salario emocional es una de ellas.
Cuando hablamos de salario emocional estamos refiriéndonos a todos los beneficios e incentivos que se le otorgan al empleado en miras de que pueda llevar adelante una vida óptima. A través de esta herramienta y de sus diferentes maneras de aplicarla, los trabajadores logran combinar perfectamente su tiempo libre, sus relaciones personales y sus horas de trabajo dando lo mejor de sí y potenciando la productividad de la empresa.

Cómo mejorar nuestro clima laboral

Para lograr un excelente clima laboral y así mejorar el desempeño de los trabajadores y aumentar la productividad de la empresa, es fundamental que se cuiden ciertos aspectos personales y emocionales del grupo de empleados con el que contamos. Veamos algunos consejos para mejorar el salario emocional:

Generar buenas relaciones laborales.

Si bien este punto puede sonar obvio, muchas veces damos por sentadas ciertas relaciones y no nos dedicamos a cuidarlas o a cultivarlas. Para que una compañía funcione bien, se debe incentivar a que existan buenas relaciones entre los compañeros de trabajo, evitando a toda costa proponer actividades que puedan generar rivalidad o competencias no saludables.

Cuidado con la desmotivación.

Cuando no hay ánimos de trabajar y las cosas se hacen a la fuerza y por obligación, los resultados son bastante flacos. Como lideres debemos buscar mecanismos que ayuden a renovar las energías y los ánimos del grupo de trabajo, proponiendo nuevos proyectos y nuevas perspectivas a futuro.

La importancia de ser persona.

Debemos recordar que siempre, antes de ser jefes o empleados, somos personas y debemos aplicar esta misma regla hacia los demás. El mito urbano de que para inspirar respeto se debe ser frío y distante ya ha quedado en la historia, y se puede trabajar muy eficientemente a través del respeto y de la buena predisposición.